Nuestro país es uno de los más envejecidos en Latinoamérica (junto a Uruguay, Cuba y Chile) y según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INDEC – 2010) presenta el 14.3% de personas mayores de la población total.
El Ministerio de Desarrollo Social (MDS), a través de la Dirección Nacional de Políticas para Adultos Mayores (DINAPAM) de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNAF), lleva a cabo políticas públicas que acompañan y favorecen el envejecimiento poblacional en Argentina. En este sentido, el Programa Nacional de Cuidados Domiciliarios (PNCD) es sin duda una de las acciones más potentes a la hora de promover y respetar los derechos de los mayores y, en especial, de aquellas personas mayores en situación de vulnerabilidad social o que requieren un apoyo calificado ante alguna dependencia.
El mencionado Programa, con el compromiso de lograr la mayor permanencia de las personas mayores en sus hogares el mayor tiempo posible y conveniente, forma Cuidadores Domiciliarios en todo el Territorio Nacional. Con una impronta federal, el PNCD llegó a todas las provincias argentinas generando un fuerte impulso educativo y laboral.
En los últimos años, se profundizó el rol de los Cuidadores Domiciliarios por ejemplo con la inclusión de la figura del cuidador en el Régimen Especial de Contrato de Trabajo para el Personal de Casas Particulares (Ley 26844), que constituye un claro avance en el reconocimiento de los derechos de los trabajadores, proceso que deberá profundizarse en pos de la especificidad del rol y las funciones del cuidador domiciliario.
Por otro lado, y en esta misma línea, la Dirección Nacional de Políticas para Adultos Mayores de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia junto al Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET) del Ministerio de Educación Nacional, aprobaron un marco de referencia para la formación profesional inicial de Auxiliar en Cuidados Gerontológicos, mediante la Resolución CFE Nº 149/11, un importante logro que jerarquiza el rol del cuidador formado.
OBJETIVOS GENERALES
Promover la autonomía, la calidad en el cuidado y el bienestar integral de las personas mayores con algún grado de dependencia a través de la formación de recurso humano calificado en la temática de la atención domiciliaria.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Formar recurso humano calificado para la atención domiciliaria desde una perspectiva integral basada en un paradigma de derechos.
Incorporar conocimientos teórico-prácticos sobre la temática del cuidado y la atención domiciliaria basados en la perspectiva de la atención centrada en la persona.
Desarrollar en las y los educandos las habilidades técnicas y sociales necesarias para el cuidado fomentando las buenas prácticas.
Consolidar al cuidador en el ejercicio de su rol fortaleciendo su capacidad de autocuidado y la autovaloración.
Brindar herramientas que permitan la organización de sistemas de empleo y de distintas modalidades de asociativismo y cooperativismo.
Jerarquizar el rol del cuidador a través de la formalización de su tarea generando oportunidades de acceso a fuentes formales de trabajo.
TAREAS DE LAS/LOS CUIDADORAS/ES DOMICILIARIAS/OS
- Las tareas que se espera que desarrollen las/los cuidadoras/es en función de los conocimientos construidos durante el desarrollo del Curso de Formación, son:
- Acompañamiento y asesoramiento en todas las actividades de la vida diaria.
- Administración de medicamentos indicados por profesionales.
- Preparación de alimentos.
- Ingesta asistida.
- Higiene y confort.
- Autocuidado de la persona mayor.
- Uso del tiempo libre, actividades recreativas y ocupacionales acorde a sus posibilidades.
- Colaboración en las prácticas indicadas por el profesional.
- Detección de barreras arquitectónicas. Adecuación de hábitat. Prevención de accidentes.
- Prevención del síndrome de burnout.